El Museo del traje de Madrid se refiere a la indumentaria tradicional como uno de los tesoros de su colección y referente para estudiosos y aficionados. Tanto los trajes como otros elementos que los complementan datan en su mayoría de los siglos XVIII y XIX y fueron recogidos antes de 1925, año en el que se organiza la Exposición del Traje Regional en el Palacio de Bibliotecas de Madrid, todo un hito en la vida cultural española. Posteriormente y tras largas vicisitudes, con la mayoría de los fondos allí expuestos y otros muchos reunidos posteriormente, se creó en 1934 el Museo del Pueblo Español, antecedente directo del Museo del Traje.
El Museo del Traje, a partir de ahora, ofrece a los visitantes una exposición compuesta por más de cuarenta trajes completos y una pequeña selección de objetos de la vida cotidiana. Destacan los trajes de uso festivo, junto a algunos de diario o de trabajo y tres de personajes enmascarados relacionados con la danza. Los objetos aluden al contexto de los trajes, entre ellos hay instrumentos musicales, útiles de hilar y tejer, aperos de apicultura, mobiliario, arte pastoril, o juegos tradicionales. Todas estas piezas están se agrupan en torno a cinco secciones, que se corresponden con cinco vitrinas
Evoluciones: los cambios experimentados a lo largo del tiempo, aunque muy pocos estructurales, han dotado a muchos de ellos de un cierto eclecticismo.
Fiestas rituales: asociada al calendario festivo existe una indumentaria específica y singular adaptada a cada celebración. Algunas fiestas siguen el calendario agrícola o el santoral católico; otras, antiguas representaciones medievales (Autos Sacramentales, ciclo de Navidad, de Carnaval y Corpus Christi, esta última con su permanente dualidad entre el bien y el mal); las hay de origen histórico (moros y cristianos o soldadescas); y muchas con una cierta relajación moral, con danzantes como protagonistas.
Iconos de oficio: los trajes de oficio son trajes específicos, perfectamente adaptados a cada profesión, gracias a sus prendas y complementos o a los materiales con que están confeccionados, y están condicionados por el clima, el terreno y los materiales existentes.
Pervivencias e identidades: en los trajes tradicionales conviven siluetas diversas y prendas de diferente cronología e influencia artística, desde el Medievo al Art Déco, que los dotan de características diferenciales, al igual que a la joyería. Coincide tejeduría artesanal con industrial, confección manual con mecánica, tintes naturales con químicos.
Exaltación de la riqueza: los trajes más lujosos son los galanos, vestidos durante las fiestas locales, y los de ceremonia. Se asocian a ritos de paso y al ciclo vital: nacimiento, boda y defunción. Están constituidos por abundantes piezas, con sentido acumulativo, cuya riqueza deriva de la calidad de tejidos, ornamentos, calzado y fundamentalmente joyas.