Descripción del producto
Entre la faja, a buen recaudo, guardaban los hombres esta pieza que empleaban como monedero. Se trata de un elemento similar a las faltriqueras femeninas. Recibe diferentes nombres, según las zonas: realera, media, pocha.
También se llamaba el ruge, por ejemplo por el ruido que producían las monedas en el interior y de esa abundancia sonora nació la popular expresión catalana “Salut i força al canut”, para trasladar buenos deseos de salud y poderío económico.
Como está tejido a mano, de forma totalmente artesanal, podemos personalizarlo con colores o motivos a tu gusto.
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